En los últimos años, la Inteligencia Artificial (IA) ha revolucionado la forma en la que se llevan a cabo los procesos en los distintos campos laborales; uno de ellos el Comercio Exterior (CE).
En México por muchos años se ha realizado de la manera tradicional; es decir, mediante procesos y operaciones manuales. Actualmente, y derivado de la contingencia generada por el COVID-19, el 40 % de las empresas mexicanas aceleraron el uso de software y hardware con IA.
De acuerdo con el estudio Global AI Adoption Index 2022, realizado por Morning Consult, petición de IBM, hoy en día, el 31 % de las empresas en México han adoptado el empleo de IA en sus procesos. Pero, ¿Qué es Inteligencia Artificial y por qué cada vez más empresas la están utilizando?
La IA, como lo describe Lasse Rouhiainen en su libro Inteligencia artificial para los negocios, es la habilidad de los sistemas informáticos de efectuar análisis de datos y, a partir de estos, tomar decisiones similares a las de los humanos. Dentro de las ramas de la IA podemos encontrar al Machine Learning, el cual permite mediante algoritmos que las máquinas aprendan sin ser expresamente programadas para ello. En esencia, su proceder se fundamenta en predicciones realizadas con base en el aprendizaje y a partir del análisis y aplicación de gran cantidad de datos.
El uso de la Inteligencia Artificial en Comercio Exterior
En 2007, México ocupaba el lugar 62 a nivel mundial en el tiempo requerido para el procesamiento de documentos de CE. A partir de la implementación de la VUCEM en 2011, se avanzó en materia de simplificación y digitalización, colocando a nuestro país en el lugar 53 en 2018, dando así sus primeros pasos en la implementación de sistemas de optimización electrónica.
Actualmente, autoridades aduaneras de países como la Unión Europea (UE), utilizan la IA para crear listas dinámicas y hallar a contribuyentes que no estén cumpliendo con sus obligaciones, lo que les permite detectar fraudes en cualquier transacción.
Estos sistemas también admiten el pago electrónico de declaraciones de derechos e impuestos, tasas de licencias o tasas portuarias; además, pueden comprender módulos contables específicos para pagos y devoluciones de efectivo, crédito, extractos, anticipos, garantías y depósitos, lo que ayuda a las autoridades a tener un mejor control y manejo, recomendando su uso en el sector empresarial.
Por su parte, las empresas pueden aprovechar esta tecnología en la optimización de sus operaciones de Comercio Exterior y del cumplimiento aduanero. Utilizarla representa diseñar estrategias más robustas en la supervisión del cumplimiento normativo, por ejemplo, partiendo de una auditoría, a través de una planeación y poniendo en práctica un seguimiento constante.
Ahora bien, hablemos de lo complejas que pueden resultar dichas operaciones. Un buen caso para ilustrar esto es que las empresas requieren cumplir con ciertos procesos, que a su vez demandan recursos; a pesar de esta inversión, no están exentas de cometer errores, lo que puede generar uno de los principales cuellos de botella operativo en su cadena de suministro.
Para las empresas, hacer uso de IA contribuye a la estandarización de dichos procesos, optimizándolos y logrando una serie de beneficios como el ahorro de tiempo, trabajo y dinero.
Cada día son más las corporaciones que invierten en el uso de IA para realizar estos procesos de manera eficiente, eficaz y automatizada, aunado al cada vez más frecuente uso de dispositivos inteligentes en apoyo de esta tecnología, utilizándola para diversos procedimientos:
Declaraciones automáticas: el cumplimiento de los requisitos en las declaraciones aduanales y el estar al día con las regulaciones, en muchos casos provoca que los procesos sean más tardados de lo que deberían.
En la Unión Europea, por ejemplo, existen desarrollos que permiten la presentación simultánea de una declaración de exportación del país de salida y otra de importación en el país de destino, combinadas con el tránsito para garantizar un cruce fronterizo sin fricciones.
Estos sistemas poseen conexión directa con los de las autoridades aduaneras correspondientes de los países de la Unión Europea, permitiendo el envío en tiempo real de dichas declaraciones y generando un ahorro significativo de tiempo y personal.
Clasificación arancelaria: en México, la clasificación arancelaria se realiza usualmente de forma manual. No obstante, este proceso se ha actualizado y hoy en día son más las empresas que apuestan a la clasificación arancelaria a través de la IA.
Ésta se lleva a cabo a través de la lectura y comprensión de descripciones de productos comerciales, realizando predicciones para su clasificación en el Sistema Armonizado. Estos sistemas tienen bases de datos en constante actualización de millones de fuentes regulatorias con cobertura en diversos países de la OMC, lo que posibilita la mejora del cumplimiento de regulaciones, las tasas de impuestos, el cálculo de aranceles y la aplicación de acuerdos comerciales. Esta herramienta permite disminuir los tiempos y el esfuerzo que la clasificación implica, así como una toma de decisiones más certera y eficaz.
Gestión administrativa: las operaciones de comercio exterior requieren de ciertas tareas administrativas de forma repetitiva, mismas que exigen precisión y detalle minucioso. Por ello, pueden ser origen de errores con impacto en temas legales, contables y financieros.
Gracias al Machine Learning el llenado automático de documentos está revolucionando y agilizando estos procesos.
A través del reconocimiento de textos a partir de imágenes, se pueden comprender los datos plasmados en ellas, completando de manera automática la escritura mediante la IA de los campos requeridos en los sistemas. Esto ha brindado un ahorro significativo de tiempo y llenado de pedimentos, lo que representa una potencial disminución de errores de captura, así como de trabajo y personal para realizarlo.
Auditoría interna: las auditorías internas permiten a las empresas identificar áreas de riesgo y oportunidad de mejora, posibilitando la revisión del esquema de sus operaciones para comprobar si es el más eficiente para su negocio. Gracias a la IA, en la auditoría interna las empresas pueden mejorar su flujo de trabajo y minimizar los riesgos, ya que el uso de ésta reduce la carga de trabajo manual. Además, permite evaluar datos masivos de manera rápida, ofreciendo información estratégica para la toma de decisiones.
Como dato extra, según datos del INAI, en lo que va del 2022 se han realizado más de 1000 actos de fiscalización por parte de la autoridad aduanera en México, por lo que, de haber detectado errores en el cumplimiento de alguna operación durante esta inspección, las empresas pudieron haber sido acreedoras de una sanción.
Previo de la mercancía: para muchos, ésta es considerada una tarea desgastante, pues implica traslados de personal de un lugar a otro para verificar que los datos declarados en el pedimento concuerden con lo que se presenta físicamente ante la aduana.
La IA también está siendo de gran ayuda en la revisión física de las mercancías en el despacho aduanero, ya que actualmente este proceso se puede realizar de manera digitalizada. Se usan dispositivos de reconocimiento como drones para identificar las mercancías, su descripción e incluso contabilización, sustituyendo procesos manuales y brindando beneficios como el aumento de productividad. Gracias a esto se cubren más operaciones con menos personal, evitando los traslados entre recintos y oficinas, reduciendo los costos de la agencia aduanal, entre otros.
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